Tipos de Razonamiento
Hay 3 tipos principales de razonamiento: Deductivo, Inductivo y Abductivo.
Razonamiento Deductivo usa hechos existentes y lógica para crear un nuevo hecho perfecto. Usamos esto en Matemáticas.
Ejemplo: Una hora tiene 60 minutos. Caminé 60 minutos. Entonces caminé una hora.
Ejemplo: Un hexágono es una figura plana con 6 lados rectos. Esta figura plana tiene 6 lados rectos. Entonces esta figura es un hexágono.
El resultado es seguro que sea verdadero. Justo lo que amamos en matemáticas.
Razonamiento Inductivo usa observaciones para crear reglas generales que probablemente sean verdaderas. Este razonamiento se usa mucho en Ciencia.
Ejemplo: Todos los conejos que observamos regresaron a madrigueras. Entonces (hasta donde sabemos) los conejos viven en madrigueras.
Ejemplo: Un estudio mostró que los estudiantes que no practicaron también obtuvieron bajas calificaciones en los exámenes. Entonces parece que la práctica es importante para aprobar.
Nos da una buena comprensión del mundo que nos rodea y nos ayuda a dominar muchas cosas.
Es correcto hasta donde sabemos, y puede mejorarse cuando aparecen nuevos hechos.

Ejemplo: Los europeos creían que todos los cisnes eran blancos, ¡hasta que los exploradores descubrieron cisnes negros en Australia!
Razonamiento Abductivo usa observaciones para llegar a las conclusiones más probables. Este razonamiento se usa mucho en la vida cotidiana.
Ejemplo: hay muchas flores hermosas en el jardín de Ernesto, así que pensamos que Ernesto es un buen jardinero.
Ejemplo: Sara es muy saludable, así que probablemente Sara tiene una buena dieta.
Ejemplo: Jonathan es alto y atlético, así que probablemente es jugador de baloncesto.
Este razonamiento puede ayudarnos a tomar decisiones rápidas en la vida. Por ejemplo, si queremos consejos de jardinería podemos preguntarle a Ernesto.
¡Sherlock Holmes usa este tipo de razonamiento!
Pero ten cuidado de no tener prejuicios. Mantén siempre la mente abierta.
Conclusión
El razonamiento es una herramienta poderosa que nos ayuda a explorar y comprender.
No es necesario recordar los nombres, pero es bueno conocer los diferentes tipos de razonamiento y para qué son útiles.
Siempre hay más por aprender, y mantener la mente abierta es clave.
¡Feliz razonamiento!